Hamás anunció este lunes que aceptó una nueva propuesta de mediadores árabes para un alto el fuego en la Franja de Gaza, en medio de una guerra que, tras 22 meses, ha dejado más de 62 mil palestinos muertos y un escenario humanitario al borde de la hambruna.
El movimiento islamista confirmó su respaldo a la iniciativa presentada por Egipto y Qatar, aunque Israel advirtió que sus posiciones no han cambiado y reiteró que no cesará las operaciones militares hasta garantizar la liberación de todos los rehenes y el desarme de Hamás.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, puso en duda el avance de las negociaciones. “Sólo veremos el regreso de los rehenes restantes cuando Hamás sea confrontado y destruido”, escribió en redes sociales. Washington ha participado en las gestiones junto con El Cairo y Doha, que promueven una tregua inicial de 60 días.
El canciller egipcio, Badr Abdelatty, explicó que la propuesta incluye la liberación parcial de los cerca de 50 rehenes que aún permanecen en Gaza y negociaciones posteriores para un cese permanente de hostilidades. Señaló que el enviado estadounidense Steve Witkoff fue invitado a sumarse a las conversaciones, en las que también participan el primer ministro qatarí, Sheikh Mohammed bin Abdulrahman Al Thani, y el dirigente de Hamás Khalil al-Hayya.
Israel, sin embargo, mantiene planes de reocupar Ciudad de Gaza y otras zonas densamente pobladas, una decisión que ha generado fuertes críticas internacionales y protestas masivas dentro del propio país, donde miles de personas exigieron el fin de la guerra y el regreso inmediato de los rehenes.
El primer ministro Benjamin Netanyahu afirmó que los reportes sobre la aceptación de la propuesta reflejan que Hamás “está bajo una presión masiva”, pero subrayó que su gobierno seguirá adelante con la ofensiva.
Mientras tanto, la situación humanitaria en Gaza se agrava. El Ministerio de Salud, controlado por Hamás pero considerado por la ONU como una fuente confiable de datos, reportó 62,004 muertos y más de 156 mil heridos desde octubre de 2023. La mitad de las víctimas, asegura, son mujeres y niños.
El organismo añadió que casi 2 mil personas han muerto desde mayo al intentar obtener ayuda humanitaria, en medio de denuncias de disparos contra multitudes hambrientas. Además, las muertes por desnutrición van en aumento: 112 niños y 151 adultos han fallecido por falta de alimentos desde el inicio del conflicto.
Amnistía Internacional acusó a Israel de llevar a cabo una “campaña deliberada de hambre”, mientras que las agencias de la ONU insisten en que las restricciones militares y el colapso del orden público impiden una distribución eficaz de la ayuda.
La aceptación de Hamás abre una ventana a la posibilidad de una tregua, pero el desenlace dependerá de la respuesta del gobierno de Netanyahu, que hasta ahora se ha mostrado reacio a detener la ofensiva en Gaza.
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