En el municipio de Atlixco, Puebla, la preocupación crece entre sus habitantes ante el constante aumento de casos de desaparición de personas, un fenómeno que ha marcado los últimos años de gobierno. De acuerdo con datos oficiales del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), 136 personas han desaparecido desde octubre de 2021, coincidiendo con el inicio de la administración de Ariadna Ayala Camarillo.
Este dato refleja una alarmante frecuencia mensual, con un promedio de tres personas desaparecidas cada 30 días, lo que contradice la imagen de tranquilidad que se asocia al municipio catalogado como «Pueblo Mágico».
Durante su primer año al frente del gobierno municipal, la actual presidenta Ayala Camarillo, militante del partido Morena, registró 30 investigaciones por desaparición, pero el panorama empeoró al año siguiente, cuando los reportes aumentaron a 46 carpetas nuevas, lo que implicó un incremento de más del 50% en los casos.
En su tercer año, la cifra bajó ligeramente a 38 casos, aunque sigue siendo una estadística considerable. Sin embargo, durante los primeros diez meses del segundo periodo de mandato de la alcaldesa —tras lograr la reelección—, ya se han acumulado 29 reportes más, lo que mantiene vigente la crisis.
Uno de los episodios más recientes y dolorosos es la desaparición de José Miguel Saavedra Morales, de 15 años, y Damián Alexis Rosas Torres, de 14, quienes fueron vistos por última vez el pasado 30 de septiembre. Las autoridades han activado la Alerta Amber correspondiente y emitido fichas de búsqueda, aunque aún se desconoce el paradero de ambos adolescentes.
Sus familiares han externado temor por la seguridad de los menores, al no contar con pistas claras sobre el lugar donde fueron vistos juntos por última vez. En este contexto, han pedido el respaldo ciudadano y el apoyo de los cuerpos de seguridad, preocupados por la posibilidad de que los jóvenes hayan sido víctimas de algún delito.
Mientras tanto, la administración local enfrenta cuestionamientos sobre la efectividad de sus acciones preventivas y de reacción ante estas desapariciones, en un municipio que solía destacar por su vocación turística y su relativa calma.
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