El Congreso de Perú declaró este jueves “persona non grata” a la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, acusándola de “injerencia en los asuntos internos” del país andino, tras el asilo político otorgado a Betssy Chávez, ex primera ministra del expresidente Pedro Castillo.
La medida fue aprobada por mayoría parlamentaria y se produce en medio de la reciente ruptura de relaciones diplomáticas entre Lima y Ciudad de México, anunciada a inicios de semana por el canciller peruano, Hugo de Zela.
El asilo a Betssy Chávez, quien enfrenta un proceso judicial por presunta participación en el intento de golpe de Estado de 2022, ha sido el detonante del nuevo conflicto diplomático. La exfuncionaria permanece actualmente en la residencia de la Embajada de México en Lima, a la espera de que el gobierno peruano decida si le otorga un salvoconducto para abandonar el país.
En un comunicado difundido en su cuenta oficial de X, el Congreso peruano argumentó que la mandataria mexicana ha mostrado una “posición hostil” hacia Perú desde que asumió la presidencia en octubre de 2024. Los legisladores señalaron que las declaraciones y gestos de apoyo de Sheinbaum hacia la familia del expresidente Castillo constituyen “una inaceptable injerencia” en los asuntos internos peruanos.
Las tensiones entre ambos países se arrastran desde diciembre de 2022, cuando Castillo fue destituido y encarcelado tras intentar disolver el Congreso. México, entonces encabezado por Andrés Manuel López Obrador, condenó públicamente su destitución y otorgó asilo a familiares del exmandatario.
Desde entonces, Lima ha acusado a México de respaldar “posiciones ideológicas contrarias” a su gobierno, mientras que la diplomacia mexicana sostiene que sus decisiones se basan en los principios constitucionales de protección y asilo político.
Pese a la crisis diplomática, el gobierno mexicano ha evitado responder de manera confrontativa, reiterando su voluntad de mantener los vínculos comerciales y de cooperación con el país sudamericano.
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