En lo que va del año, Puebla ha registrado un descenso en las muertes por SIDA, una enfermedad que sigue representando un desafío de salud pública en el estado. La información fue compartida por Crisbel Domínguez Estrada, directora de Salud Pública y Vigilancia Epidemiológica, quien destacó que la tendencia a la baja en la mortalidad refleja los avances en atención y tratamiento de esta enfermedad.
Domínguez Estrada explicó que, aunque la mortalidad ha disminuido en la última década, la detección de nuevos casos se mantiene estable, lo que evidencia que las estrategias de seguimiento y prevención implementadas por la Secretaría de Salud estatal han logrado mantener un control constante sobre la enfermedad.
La funcionaria también subrayó que las personas con SIDA reciben tratamiento especializado en los Centros Ambulatorios para la Prevención y Atención del Sida e Infecciones de Transmisión Sexual (Capasits), lo que garantiza atención continua y seguimiento médico adecuado para quienes viven con esta condición.
En cuanto a otras enfermedades, Domínguez Estrada indicó que la presencia del COVID-19 en Puebla es mínima, con muy pocos casos activos en comparación con años anteriores, mientras que los contagios de Influenza han tenido un ligero aumento, atendidos oportunamente en hospitales públicos.
Estos resultados, destacó la titular de Salud Pública, reflejan el esfuerzo sostenido del estado por mejorar la salud de la población y la eficacia de las medidas de prevención y tratamiento, así como la importancia de mantener la vigilancia epidemiológica constante.
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