El Gobierno de Irán condenó enérgicamente este miércoles la detención y amenaza de deportación de ciudadanos iraníes residentes en Estados Unidos, calificando estas acciones como una muestra de “racismo sistemático” y una violación flagrante del derecho internacional.
Alireza Hashemi Raya, director general para asuntos de expatriados del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní, denunció que estas medidas del Gobierno estadounidense representan una discriminación basada en la nacionalidad y religión, en el marco de una política migratoria que —según dijo— refuerza un patrón de exclusión y violación de derechos humanos. Declaró Hashemi Raya:
“Privar a cientos de personas del derecho a residir en otro país únicamente por su nacionalidad o religión constituye una forma inaceptable de racismo sistemático” … “Esta política transgrede normas internacionales fundamentales como el principio de no discriminación”.
El funcionario también cuestionó la legitimidad de las detenciones, aludiendo a la falta de explicaciones convincentes por parte de Washington sobre los motivos detrás de estas acciones. Asimismo, exigió que se respeten los derechos de los detenidos, se revele su identidad y se facilite el acceso consular correspondiente para brindarles asistencia.
Estas declaraciones surgen en medio de tensiones diplomáticas crecientes, agravadas por el reciente apoyo de Estados Unidos a acciones militares del Gobierno israelí contra intereses iraníes, lo que Teherán considera una violación de su soberanía.
Hashemi Raya anunció que la República Islámica ofrecerá total respaldo a los iraníes afectados por la medida y aseguró que, de ser necesario, se facilitará su regreso al país con apoyo del Estado:
“Estamos comprometidos con proteger a nuestros ciudadanos frente a las consecuencias de esta política discriminatoria del Gobierno estadounidense”.
La medida forma parte de un paquete más amplio de acciones migratorias impulsadas por la administración del presidente Donald Trump, que en marzo anunció su intención de revocar el estatus legal de más de medio millón de inmigrantes, lo cual ha sido fuertemente cuestionado por diversos sectores, incluyendo jueces federales y organizaciones defensoras de derechos humanos.
Las autoridades iraníes advirtieron que continuarán ejerciendo presión diplomática para que Estados Unidos respete sus obligaciones internacionales y garantice el trato digno a sus ciudadanos residentes en el país norteamericano.
También puedes leer: Israel intensifica ofensiva en Siria y golpea cuartel militar en Damasco
Foto: Redes