En medio de la controversia por las acusaciones contra Hernán Bermúdez Requena, ex secretario de Seguridad Pública de Tabasco, el senador Adán Augusto López Hernández hizo su primera declaración pública desde que surgió el escándalo. A su llegada a la sesión del Consejo Nacional de Morena, el legislador reafirmó que ya manifestó su postura sobre el asunto y confió en que las autoridades pertinentes realicen las investigaciones correspondientes.
López Hernández explicó que, al comenzar su gestión como gobernador de Tabasco, heredó una administración con serias problemáticas en materia de seguridad, destacando que el estado ocupaba el primer lugar en casos de secuestro, situación que atribuía a la gestión anterior del PRD.
Sin profundizar en detalles sobre las acusaciones contra Bermúdez, el senador indicó que durante los primeros años de su mandato enfrentó una realidad difícil en el combate a la delincuencia. También comentó que su ausencia en ciertos momentos no fue por evadir responsabilidades, sino porque estaba enfocado en el trabajo que demandaba su cargo.
Por último, López Hernández hizo un llamado a la unidad dentro de Morena, enfatizando la importancia de cerrar filas en torno a la dirigencia y al gobierno para enfrentar los retos políticos y sociales.
Por otro lado, los gobernadores afines a Morena optaron por no emitir comentarios respecto a este caso, señalando que no les corresponde pronunciarse al respecto.
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