Florida, 24 de julio de 2025 – El mundo del entretenimiento deportivo despide hoy a uno de sus íconos más representativos. Hulk Hogan, nombre artístico de Terrence “Terry” Gene Bollea, falleció este miércoles a los 71 años de edad debido a un paro cardiaco en su residencia de Clearwater, Florida. El deceso fue confirmado por medios estadounidenses y por la WWE.
Figura central de la lucha libre como espectáculo global
Con su imagen musculosa, su cinta amarilla y su inolvidable grito de guerra, Hogan fue la cara de la lucha libre durante los años ochenta y noventa. Se convirtió en el estandarte de la expansión global de la entonces WWF, ahora WWE, gracias a su carisma y conexión con el público. Fue protagonista de ocho de las primeras nueve ediciones de WrestleMania y acumuló doce campeonatos mundiales entre la WWE y la WCW.
Su rivalidad con André el Gigante y su posterior conversión en “villano” con la fundación del grupo nWo marcaron momentos fundamentales para la consolidación de la lucha libre como fenómeno cultural global.
De los cuadriláteros a la pantalla grande
Hogan trascendió el ring para convertirse en figura de la cultura popular. Actuó en películas como Rocky III y Suburban Commando, y protagonizó el reality show Hogan Knows Best. Su figura fue omnipresente en juguetes, videojuegos, cómics y productos de consumo durante décadas.
Una muerte súbita
Paramédicos llegaron a su domicilio alrededor de las 9:51 a. m. tras recibir un llamado de emergencia. Hogan fue declarado muerto en el lugar. Autoridades locales indicaron que no había signos de violencia. La WWE, en un comunicado, lamentó la muerte de quien calificaron como “uno de los rostros más reconocibles del entretenimiento deportivo”.
Reacciones y legado
Personalidades del deporte y del espectáculo expresaron su pesar, incluyendo luchadores como Ric Flair y ejecutivos de la WWE. Donald Trump Jr., con quien Hogan compartía simpatías políticas, también lamentó su fallecimiento.
No obstante, su legado no estuvo exento de controversias. En 2015, Hogan fue suspendido temporalmente de la WWE tras la filtración de grabaciones con lenguaje racista. Aunque más tarde fue reincorporado, su imagen quedó marcada. En los últimos años, también mantuvo una relación cercana con figuras del movimiento MAGA en Estados Unidos.
