La derecha en México vive una tremenda crisis, los principales partidos que la representan, el PRI y el PAN, así como sus dirigentes y candidatos, han perdido toda confianza popular. Se encuentran representados por personajes salpicados hasta el cuello de escándalos de corrupción, abuso de poder, tráfico de influencias, lavado de dinero, crimen organizado entre otras delicadezas de las que no se salva uno solo de ellos y de los que les falta responder ante instancias judiciales. “La nada” avanza y va llegando a sus costas, amenaza con devorarlos y desaparecerlos del espectro político, tal como devoró al PRD, lo que les está provocando mucha desesperación.
Esto también ha afectado a los grupos que mediante los recursos económicos y mediáticos ayudaron a su soporte cuando estaban en el poder. Aliados, o mejor dicho, cómplices del saqueo y desmantelamiento del patrimonio nacional a quienes les tocó una jugosa tajada. Los voceros-cómplices, miembros de una élite dorada como los Azcárraga, Vázquez Raña, Ealy y sus peones López Dóriga, Loret, Dresser, Trujillo, Ferriz, Gómez Leyva, Alazraki entre muchos otros, otrora beneficiarios.
Hoy una parte de esa derecha, que hizo de la corrupción su estilo de vida, busca refundarse radicalizándose y toma como sus faros a seguir a personajes como Trump, Abascal, Milei o Mussolini, una estrategia fundada en la intolerancia, la xenofobia, y la sumisión a la voluntad de las potencias occidentales y sus órganos financieros.
Entre esta crisis de cuadros, de propuestas y de acción surgen malas ideas que en otros momentos parecerían bromas de mal gusto, como el hecho de que estos heridos personajes piensen en lanzar como su candidato a alguien como Ricardo Salinas, quien, según ellos “rescataría” a México, pero más bien buscan que los rescate a ellos. Ahora, en esa ofuscadora desesperación creen haber encontrado a un gran prospecto, sin embargo, Ricardo Salinas (él sí) sería el verdadero peligro para México, aquí algunas de las bases del dicho:
- AUTORITARIO. Al pasar de los años hemos podido constatar que Salinas es una persona muy agresiva e intolerante a la crítica, para muestra basta ver sus redes sociales, su modo de responder generalmente insultando y agrediendo a quien tiene ideas diferentes a las que él postula y defiende. Él, que acusa que en México hay una dictadura, este año demandó a siete comunicadores, y exigió que Meta y Google le dieran datos de quienes participaban en su supuesto desprestigio, pero al mismo tiempo utiliza sus medios de comunicación para generar tremendas campañas de odio y desprestigio.
- ELITISTA. En ese mismo aspecto podemos ver que sus respuestas demuestran un gran desprecio a la gente pobre, adultos mayores o discapacitados. No tiene ningún tipo de empatía o sensibilidad, más allá de la que le sea redituable mediáticamente. Sin contar las numerosas quejas de los trabajadores de sus empresas, a quienes, según ellos mismos, explota y les da un trato terrible.
- PÉSIMO ADMINISTRADOR Y FINANCIERO. ¿Cómo alguien podría sentirse capaz de administrar la economía de un país y generar crecimiento, si ha demostrado su incapacidad con el patrimonio que su familia construyó por generaciones y que hoy ha llevado al borde de la quiebra, quedando endeudado, moroso y desprestigiado en el extranjero por sus ineficientes manejos y decisiones? ¿Cómo alguien pretendería ser cabeza de Estado si ni siquiera puede cubrir sus propias obligaciones fiscales con éste, y utiliza abiertamente cualquier recoveco jurídico con tal de no cumplirlas?
- SIN RESPETO POR EL ORDEN JURÍDICO. Uno de los aspectos más peligrosos de Salinas, es su desprecio por la ley y las obligaciones que como ciudadano debe observar. Salinas a finales de 2002, de manera violenta mediante un comando armado, tomó las instalaciones de CNI Canal 40, en el que se golpeó, amarró y esposó a trabajadores que ahí se encontraban, bajo el pretexto de que esta cadena había terminado unilateralmente una asociación. Después de eso se apropió del canal como si se tratara de una historia del lejano oeste, en tierra de nadie. Otro caso es el de negarse a acatar las resoluciones judiciales en México para pagar los impuestos que debe, así como el desacato de tribunales estadounidenses a pagar a sus acreedores en ese país. ¿Qué pasaría si una persona con estas prácticas tuviera acceso al poder que otorga la dirección de un gobierno?
- SIN APEGO A LA RECTITUD. Las demandas en Estados Unidos versan sobre la venta de su empresa IUSACELL a la estadounidense AT&T, sin declarar en la transacción que la primera tenía una enorme deuda por impuestos, en ese litigio Salinas tuvo que pagar una fianza en Estados Unidos por 25 millones de dólares, las constantes visitas a tribunales, la utilización de triquiñuelas jurídicas, hablan de una persona que constantemente está envuelto en conflictos, principalmente por querer pasarse de listo o aprovecharse de una determinada situación en la que considera que podría sacar ventaja.
Aunque Ricardo Salinas no tenga posibilidades reales, y pese a que varios conservadores caídos en desgracia lo tomen como su estandarte, siquiera pensar en que alguien como él ocupe la Presidencia de la República después de analizar estas señales que muestran a una persona que está en contra de los programas sociales; que es así de irascible e intolerante; que toma lo que ÉL considera suyo y no paga lo que ÉL considera que no debe, que no tiene respeto alguno por la ley y las obligaciones que ésta nos indica; una persona que dice que el programa de Javier Milei es la solución para México (hasta usas sus expresiones, como la de “zurdos de mierda”), no deja de sonar como una mala (y peligrosa) broma, que si llegara a materializarse dañaría mucho en lo político, en lo social y en lo económico a nuestro país.












