En meses recientes, un equipo de herpetólogos brasileños anunció el descubrimiento de la rana “Paratelmatobius stellaris”, conocida popularmente como la “rana de los rápidos estrellados”, en las húmedas y remotas selvas del estado de Acre, en el suroeste de Brasil. Este hallazgo, producto de una expedición de más de tres semanas dirigida por el biólogo Alexander Tamanini Mônico, del Instituto Nacional de Pesquisas da Amazônia (INPA), capturó la atención global por las particularidades biológicas y de comportamiento del anfibio.
La expedición, según relatan sus protagonistas, se vio marcada por días de intensa lluvia y abundante niebla, condiciones que dificultaron la observación y recolección de ejemplares. Mônico recuerda:
“Fue una mañana, al borde de un arroyo tumultuoso, cuando vimos por primera vez los destellos azulados entre las piedras mojadas. La emoción fue instantánea. Sabíamos que estábamos ante algo único”.
Entre las características más notables de la Paratelmatobius stellaris destacan su pequeño tamaño, piel de un azul metálico brillante con motas blancas que recuerdan un cielo estrellado, y ojos grandes adaptados a la escasa luz bajo el follaje. Es una especie de hábitos nocturnos y sumamente discreta, lo que contribuyó a que permaneciera inadvertida hasta ahora. Según el equipo, los ejemplares muestran un tipo de monogamia poco usual en anfibios y secretan toxinas leves como mecanismo defensivo.

Comunidad científica brasileña celebra que los ecosistemas brasileños aún guarden sorpresas que desafían nuestro conocimiento
La comunidad científica ha celebrado el hallazgo. La herpetóloga Mariana Silva opinó:
“Es una prueba de que los ecosistemas brasileños aún guardan sorpresas que desafían nuestro conocimiento y enriquecen la biodiversidad mundial”.
Este descubrimiento subraya que el planeta Tierra aún esconde innumerables especies y secretos. Proteger vastas regiones libres de intervención humana resulta fundamental para garantizar que criaturas como la Paratelmatobius stellaris puedan proliferar y convivir en armonía, representando una invitación global a salvaguardar la riqueza natural para las futuras generaciones
IMÁGENES: JOSE POMBAL/ RESEARCH GATE