Un enfrentamiento entre fuerzas de seguridad guatemaltecas y un presunto grupo armado mexicano desatado este lunes 8 de diciembre en la línea fronteriza con México dejó un oficial del Ejército de Guatemala herido y el hallazgo de un civil asesinado, además de equipo táctico y explosivos asegurados. Las autoridades de ambos países ya activaron protocolos de coordinación ante la escalada de violencia.
De acuerdo con el Ministerio de Defensa guatemalteco, la incursión ocurrió en municipios de Huehuetenango y San Marcos, donde unidades militares realizaban patrullajes tras recibir reportes de ataques contra pobladores. Según la vocera castrense Pamela Figueroa, los presuntos grupos armados “ingresaron al territorio nacional […] realizando disparos contra diferentes comunidades del área”.
En el intercambio de fuego un oficial resultó herido de bala en una pierna; su estado de salud es reportado como estable. La Policía Nacional Civil (PNC) documentó al menos cuatro hechos violentos en La Mesilla, Nentón y La Democracia (Huehuetenango) y en Tacaná (San Marcos).
El director de la PNC, David Custodio Boteo, detalló que los grupos criminales utilizaron incluso drones tipo “kamikaze”, incendiaron microbuses y colocaron mensajes intimidatorios en comunidades fronterizas.
En Tacaná, un autobús de transporte público fue incendiado tras un ataque atribuido a un cártel mexicano. En la misma zona se localizó el cadáver de un hombre esposado y con un disparo en la cabeza. Su identidad no ha sido confirmada.
Tras repeler la agresión, las fuerzas armadas guatemaltecas reforzaron su presencia en la zona y lograron asegurar armamento de distintos calibres, material explosivo, accesorios tácticos y drones empleados para vigilancia y ataques, todo lo cual quedó bajo resguardo del Ministerio de Defensa para su análisis como parte de las investigaciones en curso.
Disputa entre cárteles mexicanos presiona la frontera con Guatemala
Autoridades guatemaltecas señalaron que los incidentes están relacionados con la pugna entre cárteles mexicanos por el control de la frontera norte de Guatemala, donde los grupos rivales buscan abrir rutas o escapar de operativos en territorio mexicano.
La frontera de casi mil kilómetros entre México y Guatemala es una zona históricamente permeada por pasos ilegales y presencia de organizaciones del narcotráfico.
El Ejército de Guatemala informó que mantiene comunicación con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) de México para coordinar acciones de seguridad en la frontera. Ambos gobiernos han reiterado su compromiso de reforzar la vigilancia ante el aumento de la violencia criminal en la zona limítrofe.
Las operaciones militares continúan en los municipios afectados mientras las autoridades investigan la identidad de los atacantes y el origen del armamento incautado.
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