Miles de personas marcharon este domingo por el emblemático puente del puerto de Sídney en una de las movilizaciones propalestinas más grandes del país en lo que va del año. Entre los asistentes destacó la presencia del fundador de Wikileaks, Julian Assange, quien participó en la protesta acompañado de su familia, luego de su reciente regreso a Australia tras recuperar la libertad.
El evento, que paralizó el tránsito en uno de los puntos más simbólicos de la ciudad, también contó con la participación del exministro de Relaciones Exteriores, Bob Carr, quien se unió a los manifestantes como muestra de respaldo a la causa palestina.
Pese a las condiciones climáticas adversas, con lluvias y fuertes ráfagas de viento, la multitud se mantuvo firme a lo largo de más de un kilómetro de recorrido, cruzando el icónico puente inaugurado en 1932, cuyos arcos son reconocidos internacionalmente como emblema de Australia.
La senadora de los Verdes, Mehreen Faruqi, tomó la palabra durante la concentración en Lang Park, en el corazón de Sídney. Desde allí, manifestó que la jornada marcaría un hito en la lucha por los derechos del pueblo palestino, y exigió sanciones más estrictas contra Israel, a quien responsabilizó por las masacres en Gaza.
Por su parte, Assange no ofreció declaraciones ni participó públicamente en el acto político. Su presencia, sin embargo, fue interpretada como un gesto simbólico de apoyo a las demandas por justicia en Medio Oriente, en un contexto en el que su imagen sigue siendo emblemática para los movimientos sociales y de derechos humanos.
Las fuerzas de seguridad desplegaron cientos de agentes adicionales en la ciudad para garantizar el orden durante la protesta, que transcurrió de manera pacífica.
Mientras tanto, la presión internacional hacia Israel sigue aumentando. Organismos y gobiernos, entre ellos Francia, Reino Unido y Canadá, han comenzado a expresar su respaldo a un posible reconocimiento diplomático del Estado palestino, aunque no sin matices ni reservas. Las cifras de muertos en Gaza, que superan los 60 mil según el Ministerio de Salud local, han generado una creciente ola de críticas a nivel mundial.
Australia ha solicitado públicamente el cese de las hostilidades, pero aún no ha adoptado una posición formal sobre el reconocimiento del Estado palestino. La crisis humanitaria, agudizada por la falta de acceso a alimentos y servicios básicos, sigue siendo el centro de atención para la comunidad internacional.
Foto: Redes