El primer ministro francés, Sébastien Lecornu, presentó su dimisión pocas horas después de anunciar su gabinete, alegando la falta de condiciones políticas para gobernar. Su salida, aceptada por el presidente Emmanuel Macron, profundiza la crisis institucional en Francia y abre la posibilidad de elecciones anticipadas.
Lecornu explicó que la imposibilidad de alcanzar consensos con los partidos, las tensiones internas en la coalición y el clima preelectoral hacia 2027 hicieron inviable su continuidad. Intentó impulsar reformas sociales, pero la falta de cooperación parlamentaria y las exigencias de cada partido lo llevaron a abandonar el cargo.
Los Republicanos, socios clave en el gobierno, manifestaron su descontento por su escasa presencia en el gabinete, lo que amenazaba con romper la frágil alianza. La renuncia ocurre a solo 13 horas de haber sido oficializado el nuevo gabinete.
Desde la oposición, tanto la extrema derecha como la izquierda exigen elecciones legislativas anticipadas y responsabilizan a Macron por la inestabilidad. La izquierda incluso impulsa una moción de destitución contra el presidente.
La Bolsa de París reaccionó con una fuerte caída de más del 2 %, liderada por los bancos, mientras la prima de riesgo francesa se disparó, reflejando la incertidumbre del mercado ante la crisis política.
Foto: Redes