El ministro de Cultura español, Ernest Urtasun, ha impulsado un diálogo público sobre la posibilidad de que España reconozca los agravios históricos cometidos contra los pueblos originarios de América Latina, enfocándose especialmente en México. Para Urtasun, abrir esta conversación sin miedo es fundamental para fortalecer la relación entre ambos países, a los que calificó como “países y gobiernos hermanos”.
Urtasun, miembro de la coalición Sumar dentro del gobierno de Pedro Sánchez, destacó su participación como un actor clave en los primeros pasos hacia la reconciliación con México, que en los últimos años ha vivido tensiones diplomáticas tras la solicitud del expresidente Andrés Manuel López Obrador y la actual presidenta Claudia Sheinbaum de que España ofreciera disculpas formales por los daños de la Conquista. Esta petición, dirigida al rey Felipe VI, no recibió respuesta oficial de Madrid.
Durante un desayuno informativo de Europa Press, Urtasun habló de su trabajo en diplomacia cultural y promoción de la paz, poniendo como ejemplos sus esfuerzos en México y Ucrania. En particular, resaltó la cooperación con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), que permitió la apertura de cuatro exposiciones en Madrid centradas en la mujer indígena, un paso que consideró esencial para fortalecer el vínculo cultural entre España y México.
En cuanto a la relación entre la museografía y el perdón, Urtasun aclaró que los museos deben enfocarse en ofrecer exposiciones actuales, respetuosas y atractivas, mientras que la discusión sobre la responsabilidad histórica debe abordarse de manera valiente y sin temor. Subrayó que la labor conjunta con la secretaria de Cultura de México está abriendo el camino hacia la amistad y el reencuentro entre ambos países, una iniciativa que, según él, resulta necesaria en el contexto internacional actual.
Finalmente, Urtasun aseguró que España debe superar la reticencia a debatir cuestiones históricas sensibles, y que, aunque estas conversaciones pueden ser difíciles al inicio, con el tiempo generan consensos y fortalecen las relaciones internacionales.
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