Ovidio Guzmán López se declaró culpable este viernes 11 de julio ante una corte federal en Chicago de varios cargos relacionados con narcotráfico y delincuencia organizada. Con ello, se convirtió en el primer hijo de Joaquín «El Chapo» Guzmán —exlíder del Cártel de Sinaloa— en aceptar su responsabilidad ante la justicia de Estados Unidos.
Durante una audiencia presidida por la jueza Sharon Coleman, “El Ratón”, como también se le conoce, reconoció formalmente haber participado en la producción y tráfico de grandes cantidades de cocaína, heroína, metanfetamina, mariguana y fentanilo, así como en el lavado de dinero y el uso ilegal de armas de fuego. La declaración se produjo tras meses de negociaciones entre sus abogados y el Departamento de Justicia, que podrían derivar en una condena más leve que la cadena perpetua que enfrenta su padre.
Con esta admisión, Ovidio Guzmán, de 35 años, evita ir a juicio y abre la puerta a una posible colaboración con las autoridades a cambio de beneficios penales. Si bien los términos completos del acuerdo aún no han sido revelados, se espera que su cooperación incluya información clave sobre el funcionamiento de “Los Chapitos”, la facción del Cártel de Sinaloa que lideraba junto con sus hermanos Joaquín, Archivaldo Iván y Jesús Alfredo Guzmán Salazar.
Una decisión estratégica
El acuerdo de culpabilidad fue firmado por Guzmán López el pasado 30 de junio, aunque su audiencia había sido inicialmente fijada para el miércoles 10. La audiencia fue reprogramada sin explicación oficial, en medio de creciente especulación sobre un acuerdo judicial. A las 12:30 p.m. de este viernes, el acusado oficializó su decisión, asumiendo los cuatro cargos graves por narcotráfico internacional y participación en empresa criminal.
Fuentes judiciales señalaron que la admisión de culpabilidad le permitirá evitar la pena de muerte, un castigo contemplado para capos del narcotráfico en Estados Unidos y que aún pende sobre figuras como Rafael Caro Quintero e Ismael “El Mayo” Zambada.
Herencia del crimen organizado
Ovidio Guzmán es el primero de los hijos de El Chapo en admitir su responsabilidad ante un tribunal estadounidense. Junto con sus hermanos, formó parte de la cúpula de “Los Chapitos”, señalados como responsables de enviar “cantidades asombrosas” de fentanilo a Estados Unidos, según el gobierno de Joe Biden. Esta droga ha sido una de las principales causantes de la crisis de sobredosis que anualmente cobra decenas de miles de vidas en ese país.
El Departamento de Justicia ha acusado a los hermanos Guzmán de operar laboratorios clandestinos en Sinaloa con capacidad para producir toneladas de fentanilo. En abril de 2023, Washington designó al grupo como una organización “terrorista global”.
Ovidio fue detenido en enero de 2023 en Culiacán, Sinaloa, durante un operativo que desató una ola de violencia en la región. Fue extraditado a Estados Unidos en septiembre del mismo año. Inicialmente se declaró inocente, pero en los últimos meses expresó su intención de cambiar su postura.
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