Rusia oficializó un decreto que autoriza a personas de nacionalidad china ingresar sin visa por hasta 30 días, en viajes de turismo, negocios o visitas familiares. La medida, firmada por el presidente Vladimir Putin, responde al principio de reciprocidad tras la decisión de China de aplicar un esquema similar para ciudadanía rusa.
El decreto estará vigente hasta el 14 de septiembre de 2026 y contempla actividades culturales, científicas, deportivas y de intercambio socio-político. Sin embargo, no aplica para quienes busquen trabajo, estudios o residencia permanente, ni para quienes participen en transporte internacional de carga.
De acuerdo con Alexander Musikhin, vicepresidente de la Asociación de Tour Operadores de Rusia, la política podría incrementar en 30 a 40% la llegada de turistas chinos durante el verano.
Por su parte, Alexander Bragin, director de la Asociación de Agregadores de Viajes, señaló que los viajes independientes desde China podrían duplicarse, lo que beneficiará la ocupación hotelera incluso en temporada baja.
“China actualmente es el país que más turistas envía a Rusia”, afirmó Nikita Kondratyev, funcionario del Ministerio de Desarrollo Económico. Con la nueva política, se espera que más de 2 millones de visitantes chinos lleguen a Rusia en 2026.
La decisión se enmarca en un intercambio diplomático de flexibilización migratoria: desde septiembre, China aplica un esquema de entrada sin visa de 30 días para ciudadanía rusa, limitado a turismo, negocios y visitas familiares.
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