LONDRES, REINO UNIDO, 24 DE JUNIO DE 2025. Siete personas fueron detenidas hoy en Londres tras manifestaciones en apoyo a Palestine Action, un colectivo activista que el gobierno británico busca proscribir bajo leyes antiterroristas. Este movimiento legal ha generado un intenso debate sobre la libertad de expresión y los límites del activismo civil en el Reino Unido.
La controversia escaló tras la incursión de miembros de Palestine Action en una base aérea militar del Reino Unido, donde reportaron haber dañado dos aeronaves. Este incidente fue el detonante que motivó al gobierno británico a invocar legislación antiterrorista para intentar prohibir formalmente al grupo. Si esta prohibición prospera en el Parlamento Británico, la mera pertenencia a Palestine Action se convertiría en un delito, una medida que críticos consideran desproporcionada y peligrosa para el derecho a la protesta.
Activistas y grupos de derechos humanos han expresado su profunda preocupación, argumentando que la designación de Palestine Action como organización terrorista sentaría un precedente alarmante. Temen que esta acción pueda ser utilizada para criminalizar otras formas de desobediencia civil y para reprimir la disidencia política bajo el pretexto de la seguridad nacional. Las detenciones de hoy, producto de las protestas en la capital británica, son una señal clara de la tensión creciente entre las autoridades y los defensores de la causa palestina.
El gobierno británico, por su parte, defiende su postura alegando la necesidad de proteger infraestructuras críticas y garantizar la seguridad pública, particularmente después de los daños reportados en la base aérea. Insisten en que las acciones de Palestine Action van más allá del activismo pacífico y constituyen actos de sabotaje que justifican una respuesta contundente.
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