El titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Omar García Harfuch, confirmó este martes que la explosión de un vehículo registrada el sábado pasado en Coahuayana, Michoacán, no será investigada como acto de terrorismo, sino como un hecho relacionado con la delincuencia organizada y la disputa entre grupos criminales que operan en la región.
Durante la conferencia matutina en Palacio Nacional, el funcionario explicó que tanto el Gabinete de Seguridad como la Fiscalía General de la República (FGR) coincidieron en descartar el enfoque de terrorismo, pues “no se contempla en las leyes mexicanas ni en otras legislaciones internacionales” para casos como este.
García Harfuch señaló que la explosión está vinculada con la confrontación entre células afines a tres organizaciones delictivas: el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), el Cártel de Tepalcatepec y Cárteles Unidos.
El secretario detalló que en el vehículo viajaban dos personas, lo que descarta que se tratara de un cochebomba colocado de manera remota, como ocurre en otros ataques. La camioneta, dijo, provenía del estado de Colima y explotó después de que sus ocupantes la estacionaron.
Investigación por delincuencia organizada, no por terrorismo
La FGR abrió una carpeta de investigación por delitos como tráfico y acopio de armas, además de homicidio, al considerar que los hechos obedecen a actividades criminales destinadas a extorsión, narcomenudeo, trasiego de drogas, tráfico de armas y control territorial, no a la imposición de objetivos políticos, ideológicos o religiosos.
El funcionario indicó que se practican otros peritajes en el vehículo para determinar con precisión lo ocurrido, pero insistió en que el móvil principal es la disputa territorial entre las células delictivas mencionadas.
Recordó que en Michoacán estas organizaciones han agredido también a policías comunitarias, algunas de las cuales fueron reguladas por el Estado desde 2016.
A raíz del reciente asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, el gobierno federal presentó el Plan Michoacán por la Paz y la Justicia, cuyo seguimiento —aseguró García Harfuch— será permanente.
“No presentamos avances con actitud triunfalista. Este es un plan integral que vamos a continuar fortaleciendo hasta que disminuyan todos estos índices delictivos”, afirmó.
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