El Ministro Presidente electo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Hugo Aguilar Ortiz, ha señalado su intención de promover un cambio profundo en la relación entre el máximo órgano judicial del país y los pueblos indígenas. En sus primeras declaraciones tras ser electo, Aguilar enfatizó su compromiso por revertir la deuda histórica que el sistema de justicia mantiene con las comunidades originarias.
Originario de San Agustín Tlacoltepec, una comunidad mixteca de Oaxaca, Aguilar será el primer indígena en liderar la Suprema Corte en más de un siglo, desde la época de Benito Juárez. Consciente del simbolismo de su nombramiento, anticipó que buscará impulsar una reforma constitucional que integre elementos representativos de los pueblos indígenas, como el bastón de mando, siguiendo el ejemplo del Ejecutivo en sexenios recientes.
Entre sus primeras acciones al asumir el cargo, anunció la realización de sesiones regionales de la Corte, lo cual permitirá que la justicia llegue a rincones del país que históricamente han sido excluidos del debate judicial nacional. Además, propondrá que las resoluciones de la Corte sean traducidas a lenguas originarias, facilitando así el acceso a la información jurídica a poblaciones que no hablan español como lengua principal.
Otro de los ejes centrales de su gestión será el combate al nepotismo y la corrupción dentro del Poder Judicial, prácticas que considera contrarias a los principios de equidad y justicia. Aguilar dejó claro que adoptará una política de cero tolerancia a los abusos de poder y buscará recuperar la confianza ciudadana en el trabajo de los ministros.
Finalmente, reiteró que todas las sesiones de la Suprema Corte serán públicas y accesibles, en apego a lo que establece la Constitución, promoviendo así un Poder Judicial más transparente y cercano a la ciudadanía.
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