Una serie de documentos desclasificados de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) revelan que, desde mediados de los años 80, Estados Unidos ya visualizaba la decadencia del régimen priista, en gran parte por su reacción ante la crisis del sismo de 1985 y los cuestionamientos derivados del proceso electoral de 1988.
La información fue dada a conocer recientemente en una investigación de Milenio, que accedió a archivos oficiales estadounidenses. En estos documentos, se observa que la CIA analizó cómo el terremoto del 19 de septiembre de 1985, lejos de fortalecer al gobierno como había ocurrido en otros países latinoamericanos, debilitó significativamente la legitimidad del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Los analistas de inteligencia de EE.UU. compararon el caso mexicano con los de Nicaragua y Guatemala, donde los desastres naturales provocaron impactos políticos diversos. En el caso de México, la respuesta errática del gobierno encabezado por Miguel de la Madrid se interpretó como un síntoma de desgaste institucional.
Entre los factores señalados por los agentes estadounidenses se encontraba la lenta actuación gubernamental ante la emergencia, así como la negativa inicial de aceptar ayuda internacional, la censura de los medios, y el retraso en desplegar al Ejército para labores de rescate. Todo esto generó un fuerte malestar social.
Frente a esa parálisis, la sociedad civil respondió por su cuenta. Brigadas ciudadanas, médicos voluntarios y vecinos organizados se movilizaron sin esperar órdenes, creando una red espontánea de apoyo que contrastó con la inoperancia oficial.
Para la CIA, este fenómeno debilitó el poder clientelar del PRI y erosionó su legitimidad territorial, pilares sobre los que había mantenido su hegemonía durante décadas. Según los documentos, el sismo no fue solo un desastre natural, sino un punto de quiebre político que inició un proceso de deterioro que se agudizaría con el controvertido proceso electoral de 1988, cuando Carlos Salinas de Gortari llegó a la presidencia en medio de denuncias de fraude.
Aunque estos análisis pasaron desapercibidos en su momento, hoy, a la luz de los cambios políticos que ha vivido México, se entienden como una advertencia temprana sobre la agonía del régimen priista que dominaría gran parte del siglo XX.
Ilustración: Iván Rojas