La presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que la llamada Marcha de la Generación Z no representó a los jóvenes del país, sino que fue una acción organizada por sectores de la oposición, particularmente aquellos vinculados a la Marea Rosa, quienes —según explicó— intentaron presentar la movilización como una expresión juvenil auténtica cuando en realidad no lo era.
La mandataria señaló que incluso varios políticos opositores que promovieron la convocatoria decidieron no acudir al evento, lo cual evidenció, en su opinión, la falta de apoyo real. Además, subrayó que la marcha recibió impulso desde una televisora que ha mantenido una postura crítica hacia su administración.
De acuerdo con Sheinbaum, durante la manifestación se infiltró un grupo violento que llegó preparado con herramientas destinadas a dañar la infraestructura de seguridad instalada en el Centro Histórico. Afirmó que la mayoría de estas personas no eran jóvenes y actuaron con una clara intención de provocar a las fuerzas del orden.
La presidenta reiteró que su gobierno no caerá en provocaciones y que la ciudadanía desea manifestaciones pacíficas, pues rechaza la violencia como herramienta política. Insistió en que cualquier agresión contra la policía será investigada, ya que, según detalló, los ataques parecían dirigidos específicamente a ellos.
Sheinbaum también explicó que los intentos de desestabilización coinciden con la reciente decisión de la Suprema Corte que ratifica obligaciones fiscales de Grupo Salinas, una resolución que —afirmó— la oposición utiliza para intentar desgastar a su administración ante la imposibilidad de revertirla.
La mandataria señaló que su gobierno sigue obteniendo resultados, y consideró que la reacción de sus adversarios obedece a una creciente desesperación política. Subrayó que en México las decisiones las toma el pueblo y que cualquier forma de injerencia o manipulación es rechazada por la ciudadanía.
Respecto a los insultos lanzados durante la marcha, Sheinbaum indicó que no afectan su labor, pues asegura que el verdadero respaldo lo recibe en las calles, donde la gente la saluda y le muestra apoyo. Remarcó que su cercanía con la población es uno de los pilares de su gobierno.
La presidenta cuestionó nuevamente la autenticidad de la marcha al señalar que la mayoría de los asistentes no correspondía al perfil juvenil que se pretendía mostrar. Además, destacó la solidaridad y nobleza del pueblo mexicano, recordando experiencias en las que personas con pocos recursos han mostrado una enorme generosidad.
Comparó la asistencia de la marcha con otros eventos recientes en el Zócalo y señaló que actividades culturales y comerciales lograron reunir a más personas, lo cual —afirmó— refleja que en México hay paz y una vida pública activa.
También aclaró que la revocación de mandato fue una iniciativa impulsada originalmente por Andrés Manuel López Obrador y que la oposición intenta apropiarse del tema con fines mediáticos, pese a no haberla promovido en su momento.
Sheinbaum recalcó que su gobierno respeta las manifestaciones pacíficas y rechazó categóricamente las acusaciones de represión, recordando que en otros países las fuerzas del orden actúan con mayor severidad. Además, criticó a televisoras que, según dijo, repiten narrativas que han ido perdiendo credibilidad entre el público.
Finalmente, expresó su solidaridad con periodistas y fotógrafos que resultaron lesionados durante los incidentes. Aseguró que cualquier elemento policiaco que haya actuado de manera indebida será investigado, pues existen mecanismos para sancionar abusos dentro de las corporaciones.
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