En un mitin realizado el jueves 19 de noviembre frente a la Cámara de Diputados, decenas de sindicatos agrupados en la Asamblea General de las y los Trabajadores (AGT) exigieron la aprobación inmediata de la reforma para reducir la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales. Telefonistas, mineros, ferrocarrileros, trabajadores del IMSS y otros sectores laborales demandaron no sólo una reducción de horas, sino también avances en prestaciones como aguinaldo, licencias de paternidad y días de descanso dignos.
Los dirigentes sindicales advirtieron que la larga tradición de jornadas extensas no sólo vulnera la salud de las y los trabajadores sino que empeora la calidad de vida familiar. Desde el templete instalaron que la reforma debe servir para reivindicar un sentido humano del trabajo, no sólo una medida técnica. Al final del mitin, una comitiva ingresó a la Cámara para dialogar con los legisladores de la Comisión de Trabajo, exigiendo que el dictamen se vote antes de que concluya el periodo ordinario.
El 1 de mayo de 2025, Sheinbaum anunció que la reforma sería una prioridad de su gobierno. Ese mismo día, la presidenta se comprometió a presentar hoy, 20 de noviembre, la propuesta formal del proyecto de reforma para institucionalizar la jornada de 40 horas a través de la Secretaría del Trabajo. La propuesta se ha estado construyendo con las conclusiones generadas en foros de parlamento abierto.
Hasta el momento, ni la Secretaría de Trabajo ni el Congreso de la Unión han anunciado la presentación de dicha propuesta, por lo que esta espera continúa.

Orígenes y debates previos
El origen de esta reforma legislativa se remonta a 2023, cuando la diputada Susana Prieto Terrazas presentó la iniciativa para modificar el artículo 123 de la Constitución, con el fin de reducir la jornada a 40 horas y garantizar dos días de descanso a la semana, el cual ha mantenido la jornada laboral de 48 horas desde 1917. En sintonía a su iniciativa, Prieto convocó a un foro titulado “Jornada Laboral Digna” para discutir la propuesta y recoger opiniones de trabajadores y expertos.
En octubre de 2023, la Cámara de Diputados organizó foros de parlamento abierto para debatir esa iniciativa con académicos, sindicatos, empresarios y la sociedad civil. Esos debates permitieron visibilizar la demanda urgente de los trabajadores por una reforma profunda. En un comunicado, Prieto expresó que las estadísticas muestran jornadas extenuantes, con trabajadores sin tiempo para la familia y la vida personal.
En enero de 2024, la diputada Evangelina Moreno organizó otro foro titulado “Yo por las 40 Horas” en Tijuana, donde Prieto expuso su propuesta y se subrayó que la reducción no es un lujo: es parte de la justicia social para proteger la salud de trabajadoras y trabajadores. Meses después, Prieto llamó a recopilar firmas para impulsar la reforma y reportó más de 70,000 simpatizantes, con la meta de alcanzar 100,000.
A la par de la iniciativa legislativa, organizaciones sindicales como la AGT y organizaciones sociales como el Frente Nacional por las 40 Horas, han impulsado movilizaciones en la capital del país y en diversas ciudades, incluyendo foros informativos para la sociedad. La exigencia activa de estas agrupaciones fueron clave para presionar en el avance de las discusiones y la generación del proyecto de reforma aunque para éste se ha insistido en que la reducción debe ser gradual para dar tiempo a las empresas de adaptarse, según reportes del Congreso.
Fotografías: Redes












