La filial mexicana de Mondelez International, fabricante de Chiclets y Adams, enfrenta dos denuncias ante el Mecanismo de Respuesta Rápida del T-MEC, por presuntas imposiciones sindicales y violaciones a la libertad laboral de sus trabajadores.
De acuerdo con la Unión General de México (UGM), afiliada a la FROC-Conlabor, la empresa designó de manera unilateral a la Federación de Sindicatos “Jesús Moreno Jiménez” como representante de los empleados, sin consulta ni elección democrática.
“Esta acción representa un obstáculo para la vida sindical libre”, denunció la UGM, que decidió promover una segunda queja internacional tras advertir que la compañía repite prácticas de control sindical.
El abogado laboralista Pablo Franco Hernández, representante legal de FROC-Conlabor, recordó que Mondelez ya había sido señalada por el mismo motivo, pero evitó sanciones internacionales tras comprometerse a mantener una postura neutral frente a los trabajadores.
“Ese acuerdo no se ha cumplido. La empresa ha actuado sin neutralidad, hay hostigamiento y exclusión hacia ciertos empleados”, afirmó Franco Hernández.
La nueva denuncia busca que Mondelez México garantice competencia sindical real, permitiendo a sus trabajadores elegir libremente a su representación y participando en procesos democráticos internos conforme a lo establecido en el T-MEC y la reforma laboral mexicana de 2019.
En junio pasado, trabajadores de la planta expresaron su inconformidad con el sindicato impuesto, al asegurar que la falta de representación legítima ha generado incertidumbre en la revisión salarial de este año y ha afectado prestaciones laborales básicas.
Un caso que expone las viejas prácticas corporativas
El conflicto en Mondelez refleja el rezago que aún persiste en la cultura laboral de las grandes corporaciones transnacionales instaladas en México.
A pesar de los compromisos asumidos ante organismos internacionales, la empresa —conocida por su poder económico y su influencia sindical— sigue operando bajo esquemas de control heredados del viejo corporativismo mexicano, donde los derechos colectivos terminan subordinados a los intereses patronales.
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Fotografía: Redes












