Únicamente 27 de los 217 municipios de Puebla cuentan con un sistema operador de agua responsable del suministro, drenaje y saneamiento, lo que significa que solo el 11% del estado dispone de una estructura formal para garantizar el acceso al recurso y su tratamiento adecuado.
El titular de la Coordinación de Gabinete, José Luis García Parra, reconoció que esta situación refleja un rezago histórico en infraestructura hídrica, por lo que adelantó que el paquete económico 2026 incluirá recursos para colectores pluviales y plantas de tratamiento de aguas residuales.
Más de la mitad de las plantas de tratamiento están inservibles
En Puebla existen 156 plantas de tratamiento, pero 74 operan con baja efectividad, mientras que 82 están completamente abandonadas desde hace años.
Sólo siete se encuentran en la capital y su zona metropolitana, pese a que es la región con mayor concentración poblacional y de descargas.
García Parra subrayó la urgencia de rehabilitar y ampliar la infraestructura, pues la ausencia de sistemas operadores en la mayor parte del estado impide vigilar correctamente la explotación de fuentes de agua y garantiza poco control sobre descargas irregulares.
Avanza identificación de descargas en el Atoyac
Por su parte, el titular de la Comisión Estatal de Agua y Saneamiento, Alberto Jiménez Merino, informó que ya fueron identificados varios puntos de descarga contaminante en la parte alta del río Atoyac, gracias al plan hídrico coordinado con Conagua, la Secretaría de Medio Ambiente y la Secretaría de Infraestructura.
Aunque no reveló cifras, adelantó que se trabaja en un paquete de acciones para cancelar descargas, rehabilitar colectores y poner en funcionamiento nuevas plantas de tratamiento.
Las sanciones —que incluirán multas y clausuras— estarán a cargo de Conagua y Profepa, instituciones responsables de vigilar la normatividad ambiental.
Ilustración: Iván Rojas












