Omar Bravo Tordesillas, ex futbolista profesional y referente histórico del Club Deportivo Guadalajara, fue formalmente imputado este domingo por un juez en el estado de Jalisco, tras ser señalado por la Fiscalía estatal como presunto responsable de abuso sexual infantil agravado.
La acusación proviene de una denuncia interpuesta por una menor, quien aseguró que los hechos comenzaron en 2019, cuando tenía 11 años. De acuerdo con fuentes relacionadas con el caso, la víctima relató una serie de situaciones que incluirían tocamientos, insinuaciones sexuales y amenazas, presuntamente cometidas por el ex seleccionado nacional.
Un aspecto relevante del caso es que la menor habría entregado una grabación como evidencia, la cual reforzaría su testimonio ante las autoridades. Aunque la audiencia inicial se llevó a cabo de forma privada, trascendieron detalles fundamentales que fueron tomados en cuenta para la imputación.
El caso es seguido por la Vicefiscalía en Investigación Especializada en Atención a Mujeres, Niñas, Niños y Adolescentes, una dependencia enfocada en delitos de género y atención a víctimas vulnerables. Fue esta instancia la que aportó los elementos de prueba que permitieron al juez dictar la imputación formal contra Bravo.
Durante la audiencia, el ex futbolista optó por no emitir declaraciones ante el juez. Por su parte, su equipo legal solicitó la duplicidad del término constitucional, lo que otorga un plazo de 144 horas antes de que se defina si será o no vinculado a proceso. La próxima audiencia quedó agendada para el 10 de octubre.
El caso ha generado un fuerte impacto público debido a la notoriedad del acusado, considerado uno de los máximos goleadores en la historia del club Chivas.
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